Tanto, pero tanto extraño no estar allí (o en alguna otra confitería de esas que te marcan), con Mirta compartiendo un tostado mixto, como hace años, cuando ella trabajaba a media cuadrita, en la Facultad...
Querido amigo, yo también lo extraño. Nuestra mesa coleccionista nos albergó durante cinco años. Ahora lo miramos como diría Discepolín, ¨con la ñata junto al vidrio". Hoy el parque nos sigue convocando. Un abrazo y gracias por tu lectura.
Tanto, pero tanto extraño no estar allí (o en alguna otra confitería de esas que te marcan), con Mirta compartiendo un tostado mixto, como hace años, cuando ella trabajaba a media cuadrita, en la Facultad...
ResponderBorrarQuerido amigo, yo también lo extraño. Nuestra mesa coleccionista nos albergó durante cinco años. Ahora lo miramos como diría Discepolín, ¨con la ñata junto al vidrio". Hoy el parque nos sigue convocando. Un abrazo y gracias por tu lectura.
ResponderBorrar